11 de septiembre de 2011

Yo también recuerdo el 11-S

"El Terrorismo islámico declara la guerra a occidente". Así abrió la cabecera del periódico ABC tras lo acontecido aquel fatídico día. Tres jornadas más tarde, su director -el de aquellos tiempos-, Antonio Zarzalejos, ya hablaba de 'Tercera Guerra Mundial', mientras en la Cadena Ser asaltaron un puñado de charlas especiales sobre las posibles consecuencias o Angels Barceló, desde Telecinco, sudaba sin parar información recopilada para sus espectadores de última hora: Yo también recuerdo el 11-S.

A las tres menos cuarto de aquella tarde en España, decidí que quería ser periodista. No fue ni porque me llamara especial atención algún famoso ni tampoco porque ansiara ser partícipe del despotrique humano. Creo que fue por un atentado terrorista: El atentado terrorista que marcó nuestra existencia. 

Me explico. Tenía 15 años, estaba apunto de comer y el chirriar de las palabras de mi madre, padre y hermano mayor acompasadas con el consumir de nuestras vidas venía siendo lo más habitual de dos a tres y media de cualquier tarde de finales de verano. Pero, como ya sabéis y habéis vivido la mayoría, el inhumano egoísmo acaecido lo cambió todo en un siempre que ya nadie recuerda, queriendo reducir al mínimo aquellas otras vidas que se sustentaban en dos edificios idénticos de 110 pisos y 450 metros de altura,  a miles de kilómetros de aquí. 

Claro queda y todos los demás nos daríamos por enterados cuan película de Hollywood es estrenada con la nueva temporada.

Sin embargo, esta vez no había ni patrocinadores ni tampoco actores en pantalla a los que viéramos lucir, ni alfombras rojas con premios por delante ni muchos títulos de crédito al final. Quizás esa es la razón por la que tuvimos que ponerle rápidamente rostro al malhechor y señalar con el dedo de la sentencia al culpable, porque su plan, cualquiera que fuera tiempo atrás, se había cumplido a la perfección y sin avisar.

Apenas recuerdo ya el fuego, el humo o el grito de la agonía. Lo que se mantiene nítido en mi mente es aquella persona que no paraba de zarandear un pañuelo blanco desde una de las cientos de ventanas del capitalismo. Ese individuo era la señora Sagrario, aquella anciana que le daba de comer a las palomas en la plaza de mi barrio; Era mi vecina Ángela, que me pide sal cuando le falta; Era mi padre, que me da un beso en la frente cada día al venir de trabajar; Era yo, porque pedía ayuda desesperada desde lo más alto y nadie podía ayudarme... Esa entrañable persona que se vino abajo con el estado del bienestar económico, eramos todos nosotros.


Quizás la ironía esté en que lo seguimos siendo diez años más tarde, aunque 2.600 luces se hayan apagado. No debemos olvidar que hay 7.000 millones más, nosotros, todos los que nos peleamos hoy por sobrevivir en este infierno que nos acompaña, con la culpa que nos corroe y la diferencia que desde entonces nos asola: Es la pesada carga de aquel derrumbe literal, la que nos ha tocado soportar.

¿Y cómo lo conseguimos? ¿Cómo podemos seguir respirando la aleación de aluminio desintegrado sobre nuestras conciencias? Personalmente, aún me froto los ojos para despegar de mis párpados el polvo de aquel World Trade Center caído y aún escucho los cuerpos humanos llover, para percibir con asombro que desde entonces, los poderosos amigos de la ironía siguen pudiendo con poder ante nuestros oídos y vista. 


Así que... ¿De qué ha servido, amigos? ¿De qué ha servido? ¿De qué? Ahí persiste después de todo, el pañuelo de la desesperada supervivencia, ¿O no? Todos agitamos angustiados el dichoso pañuelo blanco en lo que no paramos de preguntarnos 'por qué'; Pero sobretodo, en un momento en el que no dejamos de sentir cerca a nuestro padre, vecina o anciana del barrio, porque sabemos que, sin quererlo, hemos llegado a nuestro punto y final y es el instante de despedirnos de todos ellos. No queremos hacerlo y eso nos pesa, y nos mata, y nos remata.

Y resulta atrevido, porque precisamente ese es el motivo por el que sigo vivo hoy y por eso quise ser periodista. Porque ahora apenas importa cuánta gente nos dijera adiós a costa de unos pocos, si esos siguen respirando para demostrarnos que aún tenemos historias que perseguir, capturar, ajusticiar y hacer saber; Porque aún no existe equilibrio y sigue perdurando el interés por encima de lo humano; Porque desde entonces supe que mi sino no era otro que el de informaros sobre tantos, antes de que la fiebre de unos pocos, aberrantes y avariciosos, vuelva a apagarnos a todos.

Porque desde las tres menos cuarto de hace justo 10 años, surgieron más preguntas sin respuesta; Y por eso,  quizás, yo también recuerdo el 11-S.

Uc.

11 comentarios

Toni dijo...

Cuando logres una entevista con George W. Bush, presidente por aquel entonces de los EEUU, preguntale de mi parte por la relación existente entre politica exterior, terrorismo, miedo y Nuevo Orden Mundial....
Si se ha tomado un par de whiskys tal vez sea una respuesta de Pulitzer.

Salu2...amigo.

Towanda dijo...

No puedo contestar el por qué, porque también me lo pregunto desde hace muchos años...
Un abrazo.

PINKY dijo...

Manu ,a mi tampoco se me olvida ese dia ,que ya habia comido y estaba reposando antes de irme al trabajo ,lleve un susto tan grande que llame por telefono a mi marido para que mirase la tele donde estuviera ,ya que me parecia que yo lo estaba soñando un horror
besinos

Dirty Clothes dijo...

Esperemos que no se vuelva a repetir nunca más una catástrofe como aquella y algunas otras que vinieron después...

dirty saludos¡¡¡¡

Ismael U. V dijo...

Muy buen posteo, sincero y realista.
Importante, nunca olvidar, por eso nunca entenderé, el apoyo a los Palestinos, sabemos que sus lideres son terroristas, e Israel es la única democracia de medio oriente. Aprovecho para decírtelo, porque este mes la ONU decidirá si se declara un estado palestino, y porque sos un periodista interesado en la justicia, demos consciencia de la realidad, para que no se apoyen las causas injustas.
Saludos

Elisa dijo...

Siempre recordaremos lo que estábamos haciendo ese día Manu, hace 10 años.
Tengo mis fotos, pero no eran digitales. Más difícil compartirlas en el blog
Cariños

jairo F.Quindós dijo...

Manu, que recuerdos más amargos y sin duda viendo poco despues los sucesos queda en el aire si se pudo evitar mejor la tragedia, los americanos siempre han presumido de orden en el 11s reino un caos con victimas inocentes, estas ideas de venganza no llevan a nada solo a ver como pudimos vivir un 11-m y como tras tanta trifulca el mundo sigue igual, más con lucha de intereses que con valores humanos, un saludo Manu y de nada por lo de abajo las opos le recomende tu blog pues tu tematica es digna de leer amigo.

Anónimo dijo...

Y yo agradezco que me lo recomendara, me gusta mucho cómo lo llevas. En cuanto al 11-S, no creo que haya mucha gente que no recuerde qué estaba haciendo en el momento en el que los aviones se estamparon contra las torres. Todos éramos conscientes de estar viviendo algo histórico, aunque no tuviéramos muy claro qué estábamos viendo. Me ha gustado saber que estudias periodismo, es una de mis vocaciones frustradas :) ¡Saludos!

Nel Morán dijo...

Nosotros sufrimos el terrorismo de ETA, con más víctimas y menos cuento. Toda muerte es angustiosa y deprimente, pero recordemos que ellos también matan cuando les da la gana y los demás tenemos que cayar. Me tienen cansado con el 11S. Hay lugares del mundo donde todos los días son un 11S y no lo pregonan tanto.

Blogsaludos

L. Gante dijo...

Como tantos otros, también recuerdo mi 11S. Lo que más me ha llegado de esta entrada en tu blog es que sea el 11S lo que te haya empujado hacia el periodismo.
Puede que lo más grave de ese atentado, evidentemente junto al número de víctimas, sea la confrontación que se ha instalado entre la población por la oposición radical entre Occidente y el mundo árabe.
A mí este atentado me llevó a sentirme orgullosa de vivir en la civilización en la que vivo y a la que intento aportar lo que puedo; también me llevó a renunciar al radicalismo de cualquier índole, pero manteniendo más fuertes que nunca las convicciones.

Unknown dijo...

Buenas tardes, amigos de la blogosfera:

Toni: Tendré en cuenta tal premisa. Estaría genial aunque no sé si llegaré a conocer a ese señor.

Towanda: Tantas preguntas sin repuesta... Y la cruda realidad es que surgen más preguntas según más vamos viviendo. Moriremos convertidos en una gran interrogación.

PINKY: Es imposible olvidarlo... :(

Dirty Clothes: Desgraciadamente, mientras vivamos en el mismo sistema, habrá egoísmo, poder, y no creo que escapen los atentados y las masacres de la fórmula.

Ismael U.V: Agradezco tu comentario. Personalmente sí apoyo la creación de un Estado Palestino pero lo veo como algo muy complejo. Nos alejamos un poco del tema 11-S pero ya que lo mencionas, la ONU también dictó una resolución hace muchos años sobre la autodeterminación de los pueblos y ahí siguen algunos como los saharauis sin poder autodeterminarse. No creo que tenga por qué supone un punto de inflexión en la balanza, pero estaremos atentos.

Elisa: Podrías escanear algunas fotografías de aquellos tiempos para hacer algún homenaje :)

Jairo: Agradezco de nuevo la recomendación. Sobre el 11-S, creo que lo que importa es todo el símbolo que escondió detrás: Fue el inicio de la caída del mundo capitalista, que nos guste o no, es en el que vivimos nosotros.

abajolasopos: De nuevo, agradezco que me sigas y tus palabras :) Sobre el 11-S es cierto que no olvidamos ni los detalles de ese día, yo por ejemplo recuerdo que aquella noche no paré de escuchar los helicópteros sobrevolando el cielo de Madrid, supongo que por la seguridad que se extendió de repente.

Adivín Serafín: Tienes mucha razón. Suceden cosas horribles todos los días, pero creo que lo cortés no quita lo valiente, y quizás el bombo que se le ha dado a este acontecimiento en concreto es debido a todo el símbolo que esconde detrás. Como le digo a Jairo, supuso un poco la vulnerabilidad del capitalismo, al que nos guste o no y seamos más o menos amigos de los yankis, es el mundo al que pertenece nuestro País. Bebemos de su economía (Cosa que por cierto, también estamos pagando ahora) y por eso quizás de alguna manera, todos nosotros fuimos atacados ese día, por supuesto sin renegar de todo lo que tú has dicho.

L. Gante: Confirmo tu comentario que me parece que es brillante. Me sentí igual y lo que me entristece mucho es la sombra que quedó de este atentado: Ese radicalismo de los 2 mundos cuando en realidad vivimos en uno solo; Esa intolerancia revestida de odio y de temor al mismo tiempo por lo que nos pueda hacer el vecino... Es una sensación que aún permanece y que no me gusta nada.

besos y abrazos a todos y gracias por estar ahí!

Manu UC.


 
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