11 de mayo de 2009

Momento crucial para el Periodismo


El pasado fin de semana, el diario El País ha publicado un reportaje sobre el futuro del periodismo que no deja indiferente. Cuando lo leemos y analizamos en su conjunto, se nos queda un poco la idea de que aquel/aquellos que lo han escrito estuvieran, como periodistas, acojonados de que la sociedad esté cambiando y de que ésto implique un hueco para "el periodismo bloguero ciudadano" o "el intrusismo de la era digital" en la prensa;
Como si ésta idea les abarrotara o empequeñeciera profesionalmente a los de la vieja escuela. Además, he obtenido un punto de vista interesante sobre un universitario cualquiera estudicante de telecomunicaciones que ha analizado este artículo desde su óptica (algo que, como sabréis los que me seguís, me gusta tanto desde la perspectiva del análisis). Exponemos el artículo a continuación y lo iré comentando sobre la marcha (No lo expongo entero pues no sería ético, además que me quiero centrar en lo que me ha parecido más relevante):


Nunca ha habido una mejor época para hacer periodismo escrito, y nunca ha habido una peor para ganarse la vida ejerciéndolo; hay más mercado que nunca, pero menos ingresos.

No sé como lo veréis vosotros, pero a mí la introducción del reportaje ya me parece en parte un tanto contradictoria, pues si el mercado se amplía, la capacidad de invertir en él y de obtener ingresos también (al menos teóricamente). Ahora continúemos leyendo el artículo fundamentado mayormente en tres fuentes humanas, Phil Bennet (ex de The Washington Post), Waldman (desde la óptica más blogera) y John Kerry (senador estadounidense que, desde mi punto de vista, puede decir misa cantada). Pues bien, continúemos pues:


La lógica es aplastante. Y, como señala Phil Bennett, el ex de The Washington Post, tiene consecuencias injustas. Porque una vez hecha la gigantesca inversión, el producto final (...) aparece al instante y gratis en uno de los innumerables portales de Internet. “Es como construir un coche, que te lo roben y que después los asientos o las ruedas o las bujías aparezcan en los escaparates de The Huffington Post o en Google, que a su vez hacen negocio con ellas vendiendo publicidad".

Me agrada saber llegados a este punto, que un universitario cualquiera estudiante de telecomunicaciones (que ni si quiera es del sector) se da cuenta de que portales como Google, mencionados en este párrafo del reportaje, sólo pretenden facilitar a la nueva sociedad digital, la oportunidad de dirigirles con un hipervinculo (enlace) a la web de donde emana la información como producto. Por tanto, queda claro decir aquí, que Google, como se ejemplifica en este caso, no roba información a nadie; Más todo lo contrario, facilita el acceso libre a los diarios de donde emana esta información y gracias a buscadores como éste, estos medios ya digitales deben agradecer en gran medida las visitas de sus ciber seguidores.

Los otros grandes beneficiados del contenido periodístico de alto calibre en Internet son las empresas telefónicas que venden el acceso a la red. Mientras tanto, los que han invertido dinero en el producto lo acaban perdiendo.

Aquí, nuestro compañero estudiante en telecomunicaciones se siente ofendido de que parte de esta responsabilidad vaya aludida a su sector, pues a ellos no les importa tanto el producto del beneficio que en sí vende (ya sea un periódico digital o un blog). Lo que les importa, como a todo buen negociante, es que el producto que sea, venda. Mientras tanto, recalco lo que posteé hace no mucho sobre la información y sus famosos "picos de intensidad variable" (dirigir a la opinión pública a donde les interese que miren, véase "gripe porcina" en la actualidad). A lo que voy mencionándolo de nuevo es a la misma idea que os comenté sobre la información como negocio y producto empresarial. Aquí los telecos y el periodismo se dan la mano desde una óptica económica, pues se trata a la información como un mero producto que debe vender y dar el mayor beneficio. A mí, como estudiante de periodismo en funciones, no me parece bien que la información se adapte únicamente a esta óptica comercial, al menos de un modo absoluto, pues como ya sabemos, todos los diarios escritos son a muy bajo coste y no les da de comer el ciudadano en sí que compra el periódico tanto como la publicidad de la cual se nutre.

No obstante, continúemos analizando el reportaje de El Pais que después os haré llegar mis conclusiones:

Waldman contó que The Guardian ha avanzado tanto en su concepto de la centralidad de la red que hoy está reclutando a superestrellas del mundo digital, provenientes de empresas como Yahoo, sin experiencia periodística alguna. La idea, que Bennett apoya de manera entusiasta, es que la fusión de los dos tipos de cerebros, los del periodismo clásico y el digital, ayuden a crear un nuevo modelo viable. Lo que quizá no le entusiasme tanto a Bennett es la posibilidad, propuesta por Waldman y sus ágiles blogueros, de que el periodismo se transforme en un intercambio de noticias de interés compartido entre comunidades de vecinos o que se creen islas de noticias u opinión entre grupos de personas unidas por una red social sin fronteras al estilo de Facebook. “Puede ser que prefieran esa intimidad de criterio a leer lo que les dice una voz distante y desconocida”.

Llegados a a este punto, creo que hay un error de base y es el concepto que se tiene de "Periodismo" en sí mismo, pues un periodista lo es con o sin carrera, desde un punto de vista puramente vocacional. Estudio periodismo y ya estoy en cuarto de carrera, y si os soy sincero, no he aprendido a hacer mejor periodismo por estudiar en sí lo que dijo tal autor o porque me obliguen a estudiar historia contemporánea, sino porque tengo la vocación de serlo y una motivación intrínseca que no se me ha formulado precisamente por estudiar la carrera. Partiendo de esa base, es cierto que todas las profesiones requieren un mínimo exigible de conocimientos teóricos, pero en el periodismo, más concretamente como digo, aprendemos la profesión por nosotros mismos. Ésto me lleva a pensar en la idea de que a lo mejor un bloguero no profesional en el sector que no ha tenido la oportunidad de estudiar por los motivos que sean, tiene incluso mejores aptitudes que un periodista salido de la mejor escuela. Con lo cuál, ¿No merecerá también una oportunidad entendida de antemano como se dice en el artículo, como activo en funciones desde una óptica no profesional frente a los que sí lo son? A mí esta idea no me parece en absoluto nada mal, más todo lo contrario, creo que enriquece la cultura informativa (esta idea es la esencia de este blog sin ir más lejos) y nos enseña a mirar al mundo y a todo lo que nos rodea desde "otro lugar". Pero está claro, que la protesta aquí viene de lo que hemos vislumbrado antes: la información perdería o podría verse indefensa ante la idea de perder valor como producto empresarial/comercializable. No obstante, yo mismo llevo este blog y aún no soy periodista, pues no lo hago precisamente porque me vaya a llevar comisión ni porque me paguen un duro, sino por el hecho de ofreceros la información que interesa a un universitario cualquiera desde otro punto de vista diferente al de los medios convencionales, excesivamente politizados, publicitados y comercializados.

Ahora bien, sigamos con nuestro análisis:

Una opción que se ha propuesto con entusiasmo recientemente en las páginas de The New York Times y de la revista Time se basa en la idea de “salvar” al periodismo de la misma manera que se ha “salvado”, hasta cierto punto, a la industria de la música: aplicando una suerte de canon similar al de la música al comprar un ordenador, o al darse de alta en un servidor de Internet (...).

Apaga y vámonos. Ésto es ya lo que me faltaba por oir. No sólo nos quieren imponer el canon digital ya existente y del cual posteé recientemente (recomiendo que lo leáis) sino que ahora se está fraguando la idea de que se nos cobre por ser informados, justificando, eso sí, que es para "salvar" a la información, ¿Cómo que salvar a la información? ¿Salvarla de qué? ¿Salvarla de la gente que pretende informar desde su punto de vista para enriquecer una cultura informativa por muy "menos profesional" que sea? ¿No se referirán al hecho de que quieren salvar el producto informativo como producto comercial? ¿Y eso sería información? Información pagada, cuánto menos... algo que, como estudiante de periodismo me parecería aberrante en esencia.

Si el periodismo está en crisis hoy, como lo está la economía mundial, es en gran medida por la tendencia del ser humano a creer que las circunstancias de hoy se van a reproducir siempre. Y aunque los blogueros se ríen de los viejos rockeros del periodismo precisamente por esta razón, lo que ignoran es que posiblemente ellos también se encuentren atrapados en lo que acaba siendo otra variante más del mismo conservadurismo mental. ¿Y si aparece una nueva invención que suplante a Internet? O, aunque Internet siga ahí como medio de comunicación, ¿qué pasa si la gente cambia de hábitos?

Existe una diferencia entre escribir y teclear. En el Senado de Estados Unidos lo preguntaba esta misma semana John Kerry, el candidato presidencial del Partido Demócrata en 2004: ¿serán los periodistas ciudadanos, los blogueros y otros capaces de producir periodismo de alta calidad? La respuesta, según Kerry, es evidentemente que no (...).

Para culminar con este singular reportaje, se nos tacha a los blogueros (muchos de nosotros también periodistas o estudiantes de periodismo) de ignorantes. Además, parece que nos quieren meter miedo con el hecho de que algún día el fenómeno blog desaparezca (algo expresado como mera conjetura no fundamentada, por otra parte), y parece que, para terminar, se nos quieren dar lecciones de moral utilizando como fuente a un señor, que como he dicho al principio, ni me va ni me viene. Por otra parte, se menciona el concepto "calidad" ligado a la profesión, ¿Y no es calidad el hecho de que exista más diversificación informativa? ¿No es calidad distinguir entre lo profesional de lo que no lo es? ¿No es calidad el hecho de crear una red de opiniones, informaciones o expresiones diferentes? ¿No es calidad el hecho de asumir que el periodismo, como la sociedad, está cambiando y evolucionando?

Al final, lo que perdura, como las grandes novelas del siglo XIX, es la calidad.

En algo estamos de acuerdo.

Un universitario cualquiera.

1 comentario

Javi dijo...

Desde tiempo inmemorial la gente siempre ha temido lo nuevo. Es una cualidad humana innata denominada resistencia al cambio. Fruto de ella nacen cosas como el canon digital. Hablando de él... ¿no deberíamos decir lo mismo que se dice en este articulo de la información, de la cultura? Lo pintan como si Internet fuera a matar la cultura y cosas como la piratería fueran a hacer desaparecer la música el cien y cualquier forma de arte. ¿Pero no seria solo su vertiente comercial la que desaparecería?
Volviendo a la información y de manera aplicable también a la música y demás... la respuesta seria que no. Un cualquiera que publica en Internet no es un periodista, y su información no tiene el mismo valor. La prensa por politizada y comercial que sea (es asumible que en la mayoría de casos, que no en todos lo sé) suele estar no solo mejor construida sino lo que es más importante, verificada y demostrada. Antiguamente la prensa era útil para difundir al información. Hoy día el problema es el exceso de información, Tenemos que separar lo verídico y relevante de los bulos y la información ridícula.
Google triunfa por muchas razones, pero como absolutamente cualquier empresa que existe, triunfa porque cubre una necesidad de la sociedad.
Con estos planteamientos quiero decir que la prensa profesional y los bloggers no son competencia sino complementos. ¿Quién vigila al vigilante? ¿Y quien contrasta la veracidad de la información de quien se dedica a lo propio? La información periodística de primera mano tiene valor por sintetizar, asimilar y convertir un elemento en bruto como es la información, en un producto elaborado, una noticia. Pero la publicación por ciudadanos en Internet, permite dar un soporte a la misma, difundiéndola y refutándola de ser necesario. Véase por ejemplo cuando en países donde hay represión periodística, publicaciones en Internet, de ciudadanos anónimos, filtran imágenes y comentarios de lo que realmente esta pasando.
Sobre lo de si los blogs desaparecerán... puede que si o puede que no... todo depende. Esto es como lo de la era acuarius, la gente es sorprendente y nunca se sabe. Mi opinión personal es que si la tecnología lo permite, desaparecerán como tal. De igual modo que las paginas web evolucionaron de estáticas a dinámicas (dando a luz entre otras cosas a los blogs), creo que los medios escritos en general es probable que evolucionen. Antes un blog o una web era texto quizás con alguna foto. Cada día es mas fácil encontrar insertado contenido multimedia, y no me parece descabellado pensar que cualquier día evolucione hacia un medio totalmente multimedia, precisamente porque no suele estar echo por periodistas, o dicho de otro modo, porque cualquiera puede querer contar algo, pero no todo el mundo sabe escribir de manera profesional. Esto ya existe, por eso existe el termino videoblog, pero yo me refiero a ir un paso mas adelante. Porque como suelo decir en los medios digitales se suele seguir escribiendo como si se hiciera en papel, y esto es un error, pues no aprovecha todas las posibilidades de la tecnología, aunque se usen videoblogs y se inserte contenido multimedia, aun se le puede sacar mas partido del que se le saca. Pero para ello la tecnología y los hábitos de la gente deben facilitarlo.


 
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